Si tus hijos tienen perfiles en redes sociales seguramente has escuchado la palabra selfie. Sacarse fotografías con el móvil sin ayuda de otras personas para luego publicarlas en Internet es una tendencia que va en alza, sobre todo desde que las tarifas de datos y los smartphones son más accesibles, pues permite a las personas estar constantemente conectados a internet para poder compartir sus fotografías desde cualquier lugar.
El selfie se caracteriza por la forma en la que es tomada la fotografía, es decir, porque las personas se sacan las fotos a sí mismos, ya sea solos o en grupo y además por la inmediatez en su publicación ya sea a través de Facebook, Tumblr, Instagram o las distintas redes sociales a las que estamos conectados.
El momento estelar del selfie
Aunque el selfie no es un concepto reciente pues desde que hay cámaras es posible sacarse este tipo de fotografía, no es hasta el año 2013 que el término es incluído en el diccionario de Oxford y aunque aún no ha sido incluída la 23ª edición del Diccionario de la Real Academia Española, que salió a la venta en 2014.
Esta inclusión en el diccionario de Oxford es un reflejo del creciente uso de la palabra y de que en el momento presente es un término que está en boca de muchos millones de personas.
Las cifras no engañan: se toman una media de un millón de selfies cada día y 9 de cada 10 adolescentes se han tomado una selfie. Las redes sociales en las que más selfies se comparten son Facebook, Whatsapp y otras aplicaciones de mensajería instantánea, Twitter e Instagram. Además Muchos adolescentes comparten selfies que no se conservarán a través de Snapchat.
Es tal la moda del selfie que hasta el Papa, el presidente Obama se han tomado uno y hasta la reina Isabel II se ha colado en algún selfie, sin contar a los famosos, de los que el selfie más famoso es el que Ellen Degeneres se tomó con los famosos durante la ceremonia de los Oscar 2014.
Lo más fotografiado
Como el selfie se ha vuelto un fenómeno viral, los profesionales del márketing se han interesado mucho sobre la forma en la que pueden aprovecharlos para sus campañas publicitarias y son muchas las encuestas y estudios que se han hecho para estudiar cómo se ha propagado esta tendencia y qué es lo más fotografiado.
Entre los selfies destacan las fotografías de personas, ya sea juntas o en solitario aunque la tendencia se acerca más a las fotos grupales. También son objeto del selfie las decoraciones, las fotografías de comida y bebida y las instantáneas tomadas en eventos de diversa índole. Un pequeño espacio queda reservado para los selfies de personas disfrazadas.
Aunque existen algunos riesgos asociados al selfie, como el sexting o el cyberbullying, que se deben tener en cuenta para prevenirlos y evitarlos, lo que es una constante es que el selfie suele ser, en la mayoría de los casos, sinónimo de diversión y buenos momentos.
El futuro del selfie
Aunque hoy en día sólo utilizamos los selfies para temas personales, en la mayoría de los casos para guardar recuerdos de momentos agradables o para compartir cosas que nos gustan, en el futuro se estima que los usos de este tipo de fotografía serán mucho más amplios. Desde un uso más amplio en la industria de la moda hasta la incorporación del selfie en la industria de la seguridad para el reconocimiento facial o en el sector de la medicina para la diagnosis médica, los selfies son una tendencia que ha llegado pisando fuerte y que formará parte del mundo digital durante mucho tiempo.
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