Ayer acudimos a la tienda que Impossible Project tiene en Barcelona para ver de primera mano la nueva cámara I-1. Una cámara instantánea reinventada que se anunció el mes pasado y ayer llegó a los escaparates a un precio de 299€.
Cuando en 2008 Impossible Project compró la última fábrica en la que se hacía la conocida película instantánea de Polaroid, los amantes de la fotografía instantánea estuvieron de celebración, todo indicaba a que ya no podrían usar sus viejas cámaras Polaroid. En 2010 Impossible Project lanzó la primera película instantánea reformulada químicamente, pues los viejos químicos empleados en las películas Polaroid se habían dejado de fabricar.
Desde entonces ya van por la tercera generación de película, mejorándola en cuanto a calidad final y en tiempo de revelado (actualmente en 3 minutos desde la exposición ya se empieza a intuir la imagen, y en 15 minutos ya está completamente revelada).
El mes pasado, al anunciarse la nueva cámara instantánea reinventada de Impossible Project, la I-1, los aficionados a la fotografía instantánea Polaroid estuvieron de enhorabuena. Por fin podrán renovar sus viejas cámaras y dejar de buscar en el mercado de segunda mano… aunque quizás, precisamente eso, el usar cámaras de segunda mano, sea uno de los motivos que la hacen tan cool.
El reto de Impossible Project con la I-1 era crear una cámara instantánea de cero. Lo han conseguido. Han creado la primera cámara analógica capaz de conectarse por bluetooth con nuestro smartphone, dando un nuevo abanico de posibilidades a la fotografía instantánea.
La I-1 cuenta con un flash anular que aporta una luz suave y difusa. El flash dispone de 8 leds, pudiendo usar los 8 a la vez para una iluminación intensa, sólo 4 de ellos, para una iluminación más suave, o simplemente 2 de ellos, para una luz suave y difusa. Además, el flash led nos puede indicar la cantidad restante de batería de la cámara así como el número de fotos restantes en la película cargada.
El visor que incorpora la I-1 es desmontable y desplegable, quizás resulta un poco dificultoso encuadrar las escenas al principio de usarlo, pero en seguida uno se acostumbra. Además, al disponer de visor desmontable, muy pronto dispondrán de otro tipo de visores al que adaptar a la nueva cámara.
La cámara dispone de un novedoso sistema de autoenfoque, según la distancia a la que estemos enfocando al sujeto, además, la cámara usará el pequeño zoom que incorpora para enfocar correctamente. Un zoom que va de 30mm a 50mm (equivalente en paso universal) pero que no podremos manipular, sólo varia automáticamente según la distancia de enfoque.
La I-1 utilizará la nueva generación de película instantánea que no requiere una nueva batería con cada paquete de película (con venta prevista a partir de junio). La batería se encuentra dentro de la misma cámara, por lo que resultará más económico que antes y más beneficioso para el medio ambiente. Asimismo, la I-1 puede funcionar con todas las películas Impossible con batería tipo 600, aportando más flexibilidad a los usuarios.
La gran novedad, la aplicación I-1 Camera
Ya estamos acostumbrados a las nuevas cámaras digitales que incorporan conexión WiFi y permiten conectarlas a nuestro smartphone, a lo que no estábamos acostumbrados es a verlo en una cámara analógica.
Con la aplicación gratuita I-1 Camera conseguiremos transformar la I-1 en una cámara con «prestaciones profesionales», entre otras cosas podremos trabajar completamente en manual. Por el momento sólo se encuentra disponible para iOS en la App Store, se espera que de cara a septiembre esté disponible también para dispositivos Android.
Las opciones que nos permite la aplicación dedicada son:
- Disparo remoto, usando nuestro smartphone como mando a distancia para accionar el disparo de la cámara.
- Modo manual, pudiendo elegir diafragma, velocidad de disparo, tipo de flash, y uno de los 5 puntos de enfoque (de 0,2 a 0,5m, de 0,5 a 0,8m, de 0,8 a 2,0m, de 2,0 a 3,5m, y de 3,5m a infinito). Además disponemos de fotómetro para ver si estamos ajustando correctamente los parámetros.
- Disparo con temporizador, en el que podemos elegir un disparo con retardo de 5, 10 o 20 segundos.
- Doble exposición, lo que nos va a permitir jugar con hacer dos exposiciones en una misma fotografía.
- Disparo por ruido, ya sea un chasquido, un silbido, o por nuestra voz, podemos ajustar el volumen de entrada del sonido y con ello disparar la cámara.
- Light Paint, nos permite hacer un disparo en lo que sería modo bulb, y en medio accionar la linterna de nuestro smartphone para dibujar con luz en la exposición.
- Color Paint, algo similar al Light Paint, pero transformado la pantalla de nuestro smartphone en una gran paleta de colores y dibujar con ellos en la exposición.
- Scanner, como ya hace la aplicación original de Impossible Project, nos permite usar la cámara de nuestro smartphone para capturar las fotografías realizadas con nuestra I-1, corregir las posibles distorsiones al «escanear» nuestras capturas y guardarlo en el carrete del smartphone para compartirlo en redes sociales.