Hace poco más de 10 años, con la aparición del primer iPhone, el mundo de la fotografía dio un gran vuelco.
iPhone (original)
El primer iPhone, a pesar de disponer de una cámara de tan solo 2 megapíxeles, disponía de una de las mejores cámaras que se montaban entonces en un teléfono. No voy a entrar a hablar de la tecnología puntera o de la desaparición de los botones a los que estábamos acostumbrados…es de sobra conocido que ese iPhone fue una revolución. El problema de ese modelo fue su comercialización, no se llegó a vender en nuestro país y sólo se podía conseguir mediante páginas tipo eBay o encargándolo a algún amigo viajero. Luego tocaba pelearse con el modo de liberarlo…
iPhone 3G
Con la llegada del iPhone 3G y, por fin, su comercialización en muchos más países, se terminó el problema de adquirir el teléfono, pero ese modelo no trajo mejoras en cuanto a cámara se refiere. Tocó esperar al 2009 para ver el iPhone 3Gs y como aumentaba su resolución hasta los 3 megapíxeles, además, se incorporaba la capacidad de grabación de vídeo a una resolución VGA.
iPhone 4
En 2010 se presentó el iPhone 4, este modelo aumentó su resolución hasta los 5 megapíxeles, permitía grabar vídeo en calidad HD (720p) y fue el primer modelo en incorporar un pequeño led a modo de flash. Después del iPhone 1 este fue el siguiente iPhone del que disfruté (no quise hacerme con el 3G pues no me aportaba mejoras en cuanto a cámara, y el 3Gs me parecía poco robusto).
El siguiente modelo, el iPhone 4s, se presentó al año siguiente, 2011. Volvían a actualizar por completo la cámara, no sólo se aumentaba la resolución hasta los 8 megapíxeles, sino que además la óptica pasaba de una luminosidad ƒ2,8 a ƒ2,4, y se le añadía la estabilización digital. También vimos como ya se podían grabar vídeos a FullHD (1080p).
iPhone 5s
La misma cámara del iPhone 4s la vimos en el iPhone 5 (presentado en 2012) y en el iPhone 5c (presentado en 2013). En 2013, junto al iPhone 5c se presentó el iPhone 5s, que conservaba una características fotográficas parecidas a sus antecesores pero se aumentaba la luminosidad a ƒ2,2 y se añadía la opción de vídeo HD (720p) a 120 fps. Esta opción de grabación permitía reproducir los vídeos grabados a 30 fps reproduciendo la acción grabada cuatro veces mas lenta. Además, en el iPhone 5s se introdujo el modo de flash dual Led, lo que permitía realizar un disparo de flash con unos tonos de color que se adecuaban a la escena.
En 2014 llegaban los iPhone 6 y 6 Plus, Apple se decidía así a lanzar 2 modelos a la vez con diferentes tamaño de pantalla y algunas pequeñas diferencias fotográficas. El iPhone 6 conservaba las mismas características de cámara que el iPhone 5s pero añadiendo la opción de disparar en FullHD (1080p) a 60 fps en lugar de 30fps, y la cámara lenta en HD (720p) pasaba de los 120fps a los 240 fps. El iPhone 6 Plus presentaba las mismas novedades que su hermano pequeño pero además se le cambiaba la estabilización digital por una estabilización óptica.
Al año siguiente, en 2015, Apple presentaba los iPhone 6s y 6s Plus. Ambos modelos llegaron con cámara renovada. Se aumentó la resolución hasta los 12 megapíxeles e incorporaban la opción de grabar vídeo en formato 4K a 30 fps, además de FullHD (1080p) a 30, 60 o 120 fps y HD (720p) 240 fps. El modelo 6s Plus mantenía la estabilización óptica incorporada en su predecesor.
Medio año después de la presentación de los iPhone 6s y 6s Plus, la compañía de la manzana lanzaba un sencillo iPhone SE con las mismas características fotográficas que equipaba el iPhone 6s.
iPhone 7 y 7 Plus
No sería hasta septiembre de 2016 que Apple sorprendería de nuevo con la llegada del iPhone 7 y, especialmente, con el iPhone 7 Plus.
El iPhone 7 mantenía la cámara de 12 megapíxeles, pero aumentaba su luminosidad hasta una apertura de ƒ1,8, el flash se modificaba por el nuevo Quad-Led Flash True Trone y, por fin, añadían estabilización óptica al modelo “sencillo”.
Pero el gran cambio lo vimos en el iPhone 7 Plus, acostumbrados a tener una sola cámara trasera, el 7 Plus llegó con dos cámaras, una en posición gran angular (la habitual) y otra teleobjetivo, que se combinaban entre si. La cámara gran angular tenía una apertura de ƒ1,8 y la teleobjetivo ƒ2,8. Esta combinación de cámaras permitía hacer zoom óptico o jugar con el modo retrato (que se añadiría más tarde vía actualización de sistema operativo) y nos ofrecía espectaculares retratos con fondos desenfocados. La estabilización óptica la tendríamos sólo en una de las cámaras, la otra tenía estabilización digital.
Y llegamos a lo último, los 3 nuevos modelos de iPhone que se presentaron ayer: iPhone 8 y 8Plus y el iPhone X.
iPhone 8 y 8 Plus
Por un lado el iPhone 8 y 8 Plus conservan las mismas capacidades fotográficas que el iPhone 7 y 7 Plus respectivamente, pero con un nuevo sensor de mayor tamaño y veloz, nuevo filtro de color y píxeles más profundos, que mejoran la captación de luz y detalle; además se han modificado las resoluciones de grabación de vídeo, ahora permiten grabar vídeo a 4K en 24, 30 o 60 fps o podemos optar por FullHD (1080p) a 30, 60, 120 o 240 fps. Además el iPhone 8 Plus incorpora el nuevo “Modo Iluminación de Retratos”.
iPhone X
En cuanto al iPhone X, el nuevo modelo que es todo pantalla y ya no dispone de “botón de inicio”, dispone de 2 cámaras al igual que el iPhone 8 Plus, pero en lugar de estar ubicadas horizontalmente, las han puesto en posición vertical, mantiene la misma resolución de 12 megapixeles, se ha mejorado la luminosidad del teleobjetivo pasando a ƒ2,4 y ahora ambas disponen de estabilización óptica. Al igual que el 8 Plus, el iPhone X incorpora el nuevo “Modo Iluminación de Retratos”.
El nuevo modo de Iluminación de Retratos que incorporan estos nuevos iPhone, consigue efectos dramáticos de iluminación de estudio para realizar retratos espectaculares con un sutil efecto de profundidad de campo en cinco estilos de iluminación diferentes:
