Hace muchísimos años que soy un gran fan de todas las películas de James Bond. De bien pequeño ya me emocionaba cuando un domingo por la tarde empezaba una película y de repente aparecía el agente 007 disparando a cámara y con la música de fondo tan característica. Bueno, puntualizaré que me gustan a partir de «Dr. No» (1962), cuando empezó Sean Connery, pues las 3 primeras, las llamadas «no oficiales», empezando por «Casino Royale» (la versión de 1954, claro) son muy malas.
Hace unos días Movistar TV me hizo muy feliz estrenando su canal temporal en dial 30 llamado «James Bond», os podéis imaginar, una película tras otra, con documentales y «making of» entre películas en lugar de publicidad… vamos, el mejor canal de la historia!
Fue entonces, cuando volviendo a ver la película «Licencia para matar» (1989), la segunda y (por suerte) última interpretada por Timothy Dalton, me di cuenta de la aparición estelar de Olympus nada más empezar los créditos de introducción de la película:
Me sorprendió mucho tanto ver una Olympus como no haberme dado cuenta antes con la cantidad de veces que he visto la película. La Olympus que aparece es una OM 4 Ti, una cámara de película, por supuesto, que se vendió entre 1986 y 2002.
Lo curioso es que la cámara sólo aparece en los créditos de introducción, al principio y justo al final cuando ya vuelve a la película, en todo el film no vuelve a aparecer. Hice una búsqueda por Internet y si, todo apunta a un «cameo» publicitario del momento.
En la mayoría de las películas de Bond juegan con el «product placement», la colocación de productos referentes para hacer publicidad de algo, y, normalmente, cuando aparece alguna cámara fotográfica, casi siempre es una Canon, pero no, Canon no tiene licencia para matar.
De hecho, en la película aparecen otras 2 cámaras, una Hasselblad que después de montarla es un rifle de francotirador y una Polaroid instantánea que dispara un láser en lugar de flash y hace fotos instantáneas con rayos X. Ambas cámaras se pueden ver cuando Q, el carismático creador de gadgets de James Bond se las enseña, hasta incluso se ve un carrete de Kodak en el momento que abre la maleta:
Pero a pesar de las geniales cámara-gadgets, la cámara que quedó más en la retina, fue la Olympus OM 4 Ti, incluso apareció en los carteles de la película en Suecia: