Uno de los temas que más curiosidad genera entre los asistentes del Fotowalk 2, es el uso de los filtros degradados.
Los filtros degradados son un gran aliado del fotógrafo, cuando tenemos que fotografiar esas escenas donde hay mucho contraste entre la luz del cielo y la superficie. Seguro que recuerdas algún atardecer que has intentado fotografiar y te ha quedado el cielo demasiado claro y la parte inferior de la foto demasiado oscura.
Pues esto tiene una sencilla solución. Si colocamos un filtro degradado delante del objetivo, nos ayudará a compensar esa diferencia de luz que hay entre las dos partes de la imagen, creando así imágenes con una gama de luces y colores más amplia.
Puede que el próximo día que salgas a hacer fotos te encuentres con una escena así. Abres la mochila para buscar tu filtro degradado y te das cuenta que se te ha olvidado en casa. Tranquilo, no está todo perdido. Para estos casos, nunca viene mal que lleves algún trozo de cartulina negra siempre en la mochila, ya que no ocupa ni pesa nada y te puede sacar de un apuro (aparte de lo económico que es si lo comparamos con los precios de los filtros).
Con esta cartulina y con un poco de práctica, podemos conseguir el mismo efecto que el filtro degradado. ¿Cómo? Coloca la cartulina delante del objetivo de tal forma que oculte la parte del encuadre que tenga mucha luz. Una vez clicamos el disparador, deslizaremos la cartulina antes de que termine la exposición (esto va a ser mucho más fácil cuando la exposición sea lenta, para que nos de tiempo de quitar la cartulina antes de que se cierre el obturador, de lo contrario, la parte que tenía mucha luz quedará totalmente negra).
Como ves, unos sencillos trucos económicos pueden ayudarnos a mejorar nuestras fotos. ¿Tú también tienes algún truco económico fotográfico? ¿Nos lo cuentas?