La semana pasada os comenté como se hacen las valoraciones de cámaras en las tiendas de compra/venta, esta semana os quiero explicar como se valoran nuestros objetivos.
La valoración sigue un poco los criterios que se usan con las cámaras, aunque lo bueno que tienen los objetivos es que no se devalúan tan rápido como con las cámaras, pues no aparecen tantos modelos nuevos cada poco tiempo.
Primero de todo se comprueba que todo funcione:
· Autofocus. En caso de objetivos que tengan autofocus se comprueba que este mecanismo funcione perfectamente, que el motor vaya a la velocidad que tiene que ir. A veces, con el uso (o mal uso) se encalla el motor, produciendo ruidos, especialmente cuando ese objetivo ha viajado a zonas con mucho polvo o arena (tipo desiertos); es muy común que en ese tipo de zonas entre arena en el objetivo, cosa que provoca un mal funcionamiento. Si este mecanismo no funciona, ya no se valora.
· Anillo diafragma. Cada vez son menos los objetivos que incorporan el anillo de diafragmas, pero los que aun lo tienen es uno de los factores a comprobar, pues nos podemos encontrar con objetivos que no lleguen a poder posicionarse en los extremos (diafragmas abiertos o cerrados), o que este movimiento vaya muy forzado (puede venir ocasionado por el mismo motivo que nos provoca el mal funcionamiento del AutoFocus, o por un mal engrasamiento del mecanismo). Si este mecanismo ya no funciona, ya no se valora.
· Hongos. En objetivos de una cierta edad, o que han estado almacenados/guardados en sitios húmedos, nos podemos encontrar que aparecen hongos en las lentes. Dependiendo de la cantidad de hongos puede ocasionar que ese objetivo nos muestre unas fotos desenfocadas, en otros casos eso no nos afecta. Pero cuando vemos que tiene hongos el problema está en que estos tienden a expandirse fácilmente, con lo la valoración de ese objetivo peligra. Si los hongos son pequeños, es posible desmontar el objetivo (en un Servicio Técnico, por supuesto) y hacer una limpieza de esas lentes; aunque esto sólo sale a cuenta en objetivos de alta gamma/precio.
Comentar que una buena forma de evitar estos molestos hongos es, simplemente, guardar nuestro equipo fotográfico en lugares frescos y secos, y siempre que podamos añadir una bolsita desecantes de sílica gel (o Gel de Sílice). Estas bolsitas muchas veces nos vienen con zapatos que compramos, ropa, o con nuestro equipo de fotografía, sino se puede encontrar en tiendas del tipo droguerías.
Objetivo con hongos, en este caso no hay solución.
Al igual que con las cámaras, podremos vender mejor nuestros objetivos por Internet, pero si somos reacios al uso de las nuevas tecnologías, siempre podremos acudir a las tiendas especializadas en compra/venta de equipo de fotografía (nos harán mejores valoraciones que en un Cash Converters), os recuerdo algunas direcciones:
En Barcelona:
* Arpi – www.arpi.es
* Casanova Foto – www.casanovafoto.com
En Madrid:
Fotocasión – www.fotocasion.es
En Sevilla:
Martin Iglesias – www.martin-iglesias.com
* Tienen delegaciones en otras zonas, consultar web.
De venta por Internet existen varios portales, empezando por Ebay, Ojodigital, Fotonatura…
normalmente es mucho má fiable el comprar un objetivo de segunda mano en tienda que el comprar una cámara, al menos yo me fío mucho más de la compra de los objetivos 🙂
Ay, los hongos de los webs…acabo de descubrir que tengo un objetivo desastrado a cuenta de los fungi. Me cago en toas sus muelas.