Hace un par de semanas me encontraba haciendo fotos con unos amigos en la hora azul. Al día siguiente una vez editadas las fotos subí la siguiente imagen a las redes sociales y a raíz de ella surgió una interesante reflexión.

Hora azul Madeira

Una de las amigas que se encontraba el día anterior conmigo en el lugar de la foto, me dijo:

“Oye, el sitio de la foto se ve súper bonito, más de lo que realmente era. ¿La has retocado?”

Y yo: “¿La he aclarado un poco en Lightroom porque me quedó un poco oscura, nada más”

Ella: “¿Y el mar? El mar no se veía así”

Se refería a ese efecto neblina que se consigue gracias a la velocidad de obturación lenta. Es cierto, el mar no se veía así, pero no es ningún montaje, es un efecto que se crea gracias a unos parámetros concretos en nuestra cámara de fotos.

Todo empezó así. De ahí, luego debatimos sobre si los fotógrafos mostramos alguna vez la escena tal y como es. En cierto modo sí, pero obviamente, la cámara de fotos nunca nos va a mostrar todo lo que es capaz de ver el ojo humano.

“Así que los fotógrafos al fin y al cabo, nos engañáis un poco” continuó.

Engañar, engañar… hombre, según cómo lo mires. El más claro ejemplo lo tenemos en los colores. ¿Cuándo ha sido capaz una cámara en captar toda la gama tonal que percibimos nosotros con nuestros ojos? Aunque cada vez hay mejores resultados, aún no se ha llegado a ese nivel, de modo que basándonos en esa regla de tres, de alguna forma ya estamos alterando la realidad ¿no? Pero esto es un engaño o más bien, ¿una interpretación que ha hecho el fotógrafo sobre esa escena fotografiada?

Atardecer Funchal

Todos estos planteamientos me llevaron a reflexionar sobre la fotografía purista. Hay fotógrafos que se consideran como tal, pero después de todo, ¿realmente el purismo existe? Porque aunque no retoques las fotos, nunca estarás mostrando lo que había ante la cámara tal cual. Se me pasa por la cabeza que tal vez, podría ser más purista el fotógrafo que retoca las fotos en Lightroom, Photoshop, Camera Raw o cualquier otro programa de edición, e intentar conseguir por ejemplo esos colores que la cámara no ve y de esta forma acercarse lo más posible a cómo lo vio con sus ojos.

¿Cuál es tu opinión? ¿Cuándo considerarías que una fotografía es pura?