China se ha dado cuenta después de tantos fallos vergonzosos a la hora de realizar montajes fotográficos que es hora de hacer algo. Concretamente, invertirá en Photoshop y en expertos en la materia.
Han llegado a esta situación al verse por una parte, fotografías falsas de escándalos sexuales en las que se han pegado las caras de personas del Gobierno, o incluso empresarios, en cuerpos que no eran suyos, y por otro lado, porque la propaganda local a veces requiere el uso del montaje para ilustrar las noticias.
Esta inversión no se refiere sólo a mejorar las habilidades con el programa, sino también en contratar científicos para que desarrollen tecnología que sepa inmediatamente qué fotos de las que van circulando para dañar la imagen de los dirigentes es falsa y han sido manipuladas. Con esto se podrían evitar chantajes falsos, ya que menos del 10% se atreve a denunciarlos.
Respecto a esto, la profesora Li Xuewei ha comentado que su equipo lleva desde el 2011 investigando la relación entre los píxeles, ya que si combinan a dos personas en una, irremediablemente la relación entre éstos y las áreas fundidas cambia y deja trazas que pueden ser rastreadas por un ordenador. Sin embargo, añadió que esa es la teoría, pero que la práctica en realidad es más sofisticada.
De momento parece que están involucradas en proyectos relacionados la Beijing Jiaotong University, Shanghai Jiaotong University, Sun Yat-sen University en Guangzhou, Hefei University of Technology en Anhui y la Nankai University en Tianjin.
No parece algo fácil de lograr, bien con fines propagandísticos o para evitar chantajes, pero China está dispuesta a hacerle frente a semejantes errores, en algunos casos, hasta vergonzosos. Tenéis un par de ejemplos en la galería.
