Ya hemos hablado otras veces en Naturpixel del software de edición Aperture, os anunciamos también el lanzamiento de la nueva versión Aperture 3, pero esta vez os dejamos un artículo de nuestro compañero Joan Boira sobre el programa de Apple:

Aperture es uno de esos programas que, cuando lo conoces y lo pruebas, no entiendes cómo podías trabajar anteriormente sin él. No es que aporte nada especialmente nuevo, pero contiene casi todas las facetas con las que tiene que lidiar el fotógrafo después de una sesión y las realiza muy correctamente. El resultado es una reducción de tiempo de postprocesado increíble. ¿A quién no le interesa aumentar su productividad con la fotografía digital?

Mucha gente que no usa este tipo de programas argumenta que con Photoshop y algunos programas más, hacen todo lo que hace Aperture o Lightroom (programa equivalente desarrollado por Adobe). Pero, aunque puede haber casos en los que el flujo de trabajo sea ágil, en la mayoría de los casos un software de estas características nos soluciona la mayor parte de las operaciones diarias, con la excepción de retoques avanzados.

Para ponernos en situación vamos a ver el antes y el después de la aparición de estos programas …

Hace unos años el fotógrafo se encontró con una serie de cambios para los que no estaba preparado. Apareció un nuevo elemento llamado “pixel” e intentó imponerse a ese viejo amigo … el haluro de plata. Durante un tiempo hubo una lucha por defender todo lo conocido … hasta que el entorno, la rapidez, las demandas de los clientes y finalmente la calidad consiguieron “reconvertir” a la mayoría de fotógrafos a “lo digital”.

El principal problema surgió con el flujo de trabajo. Ya que tras adaptarse a los conocimientos necesarios para la realización de sus trabajos con la cámara digital, aparecieron una serie de nuevas tareas que antes no las realizaba (habitualmente) el fotógrafo y desde ese momento pasaron a formar parte de “su trabajo”. Entre esas funciones podemos citar: ajustes, revelado, retoque de originales, positivado, escaneado, ajustes de color para garantizar la uniformidad de resultados, etc.

Los fabricantes de hardware y software empezaron una carrera interminable de ofertas en material “imprescindible” y normalmente incompatible entre distintas marcas. Y cada uno hacía una parte (más o menos bien) pero era incapaz, en otras facetas necesarias.
Este factor obligaba a tener un programa (normalmente en inglés) para catalogación del archivo fotográfico, un programa para visualizar los ficheros de una cámara (y si tenías más de una, y de marcas distintas posiblemente necesitabas alguno más), otro para realizar ajustes de las fotos y su revelado, otro para retoques, para generar pases de diapositivas, para imprimir, para generar galerías web … y lógicamente debían conocerlos a fondo para poder generar fotos de calidad.

Aquí surgían los temidos problemas de compatibilidad entre distintos programas. En un programa añadías unos valores y cuando abrías las fotos en otro, no los reconocía.

Y ahí apareció “Aperture”. Era un nuevo producto que no venía a ofrecer nada nuevo, ni se destacaba por ofrecer una calidad, ni rendimiento extraordinario. Pero, no obstante ofrecía lo que nadie había realizado hasta el momento. Un programa que albergaba la gran mayoría de las necesidades de un fotógrafo en un solo programa. Ya que desde Aperture puedes organizar tu archivo fotográfico, clasificarlo, ajustarlo, revelarlo, exportarlo, imprimirlo, realizar un pase de diapositivas, generar álbumes de fotos vía web, etc.

Los ajustes que realiza el programa sobre las fotografías son de forma “no destructiva”, ya que no se aplican sobre los archivos originales, quedan referenciados en la base de datos del programa. Para obtener la foto final como la vemos en el programa deberemos exportarla (generar una nueva foto con el mismo nombre u otro).

La primera versión requería una gran inversión en maquinaria (hardware), ya que precisaba de una gran potencia para que fuera efectivo. La calidad de los revelados, la velocidad de trabajo y la flexibilidad eran mejorables. Y al cabo de un tiempo apareció Lightroom (de Adobe … los de “Photoshop”), y proponía algunas mejoras (como el rendimiento en una máquina menos potente).

A la primera versión le sucedió la segunda, requiriendo menos potencia y aumentando la velocidad, a parte de algunas novedades y mejoras.

Lightroom también se actualizó a una segunda versión. Aportando mejor rendimiento y herramientas para retoque básico (pincel, degradado, etc.), y a partir de la versión 2.4 … la esperadísima versión en castellano.

Actualmente Apple ha actualizado su “Aperture” a la tercera versión aportando mejoras y nuevas herramientas.

Por desgracia la nueva versión sigue sin contemplar nuestro idioma, aunque los responsables de Apple dicen que nos tienen muy en cuenta. Esperemos en nuevas actualizaciones se materialice.

Dada la importancia de este tipo de programas, vamos a realizar una serie de artículos que muestren el potencial de estos programas, de sus herramientas y veamos un sistema de trabajo.

Para terminar este artículo mencionaré las principales nuevas características que aporta esta nueva versión:

  • Pinceles personalizables “no destructivos”, que pintan ajustes de imagen (sobreexponer, polarizar, difuminar, etc.), para ajustes selectivos en distintas zonas de la foto (lo que evita hacer muchos retoques en Photoshop), con la facilidad que aporta la detección de bordes (para no pintar fuera de la zona a tratar).
  • Ajustes predefinidos, para aplicar efectos fotográficos preestablecidos (del programa, propios o de otro fotógrafo).
  • Nuevos pases de diapositivas, con fotos, audio, texto y vídeo en HD (alta definición). Pueden exportarse a iTunes para iPhone, iPod Touch o Apple Tv.
  • Función “Caras”, identifica los rostros de nuestras fotos y nos permite clasificarlos por nombres, localizando y organizando las fotos en función de los modelos fotografiados. Una función imprescindible para fotógrafos de moda, paparazzi, social, etc.
  • Lugares, identifica la ubicación exacta en el que se realizó una fotografía. Permitiendo explorar las fotos según la localización. Puede asignarse la ubicación de una imagen arrastrándola sobre un mapa. Ideal para localizaciones, paisajes, fotografías de peritos, etc.
  • Una superficie de trabajo mucho mas libre de herramientas y ventanas, para apreciar la fotografía a tratar con los mínimos elementos intrusivos en el área de trabajo.
  • Accesos para la publicación de fotos en Flickr, Facebook y Mobileme.

Esta versión incorpora más de 200 nuevas funciones. En próximos artículos trataremos el programa en profundidad.

Artículo publicado originalmente en www.faq-mac.com